Mostrando entradas con la etiqueta andalucismo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta andalucismo. Mostrar todas las entradas

lunes, marzo 26

El Colibrí

Desterrados 

El bosque ardía. Los animales huyeron hacia el lago. Y allí lamentaron la pérdida del decorado de sus vidas. Todos menos el colibrí. Tomó una gota de agua en su pico y se fue dirección a las llamas. Volvió una, dos, tres, cuatro veces ante la mirada atónita de los demás. Al quinto viaje, un animal cualquiera le preguntó: "¿No ves que tu esfuerzo es inútil? Ni aún con un millón de gotas, ni aún dedicando tu vida entera, conseguirías apagar el fuego". Tienes razón, contestó el colibrí, pero al menos yo estoy poniendo mi parte.

domingo, febrero 28

28-F

Paseo de Blas Infante

«Yo sé que el camino es largo y lleno de incomprensión y dificultades, pero sabed que a cada hombre que les hagáis llegar a conocer la historia de Andalucía; la personalidad de sus gentes, la manera de ser y entender la vida y la forma, sobre todo, de expresarla y desarrollarla, será una piedra firme de ese edificio que entre todos los andaluces, sin política falsa, sino con actuación legítima del querer hacia el pueblo, tenemos que levantar limpiamente y hacerlo relucir, con los valores que son propios de nuestra cultura, para ejemplo de esta humanidad perdida, hoy, en el caos de su conformismo. Será, será entonces, cuando todos los andaluces conozcan su verdadera historia y esencia ; cuando logremos llegar a obtener el poder necesario para exigir al respeto a nuestra personalidad, tan diferente de aquella que tratan de imponernos y, en cierta forma, la han hecho asimilar a nuestro desgraciado pueblo, indefenso y perdido, entre ambiciones de todo tipo, económicas, políticas y hasta culturales, tratando de matar previamente la nuestra...»

Fotografía: Paseo Blas Infante
Autor: Landahlauts

viernes, diciembre 19

Ocho años de ausencia

Plaza de Carlos Cano


«La luz que brilla con el doble de intensidad, dura la mitad de tiempo.»
De la película: Blade Runner, 1982



Hoy, 19 de Diciembre, hace ocho años que nos duele la ausencia de Carlos Cano. Ocho años desde que perdimos un alma inquieta y luchadora por la libertad. Un andaluz militante y comprometido con la difusión de las señas de identidad de Andalucía. Ya en el franquismo, Carlos Cano fue un destacado luchador por la libertad. Tanto que llegó a tener canciones prohibidas y fue declarado, en 1972, 'persona non grata' por Carlos Arias Navarro (un elogio, teniendo en cuenta que venía de un individuo conocido como "El Carnicero de Málaga").

 De su genio creativo decenas de temas que han pasado a la historia de nuestra música: - "La Verdiblanca" es considerado aún como un himno no oficial de Andalucía. - "Tango de las Madres Locas" nos mostró la lucha por la verdad de unas mujeres. Aquellas que paseaban su impotencia todos los jueves del año a las once de la mañana, junto a la Plaza de Mayo... - En "La Murga de los Currelantes" o "El Salustiano" mostró la cara más crítica y ácida del paro, el subdesarrollo, la emigración...

Supo sacudir la caspa servil que el franquismo había añadido a la Copla Andaluza, mostrándola bella y llena de dignidad. («...no es ni canción ni española, es copla y andaluza..» ). Nos hizo amar el Fado y a Amalia Rodrigues, Cádiz y su carnaval, al rey poeta Al-Mutamid de Sevilla, a Federico García Lorca, a La Habana...

«Nadie llore por mi. Si acaso, en el recuerdo, algunos versos. Llevádme donde la luz. Llevádme. quiero cantar» 

Gracias, Carlos.

lunes, agosto 11

¡Vive!


Hoy, 11 de Agosto, hace 72 años que Blas Infante fue asesinado. Había sido secuestrado unos días antes en su casa en Coria del Río. Murió en el kilómetro 4 de la Carretera de Carmona mientras gritaba ¡Viva Andalucía libre!

D. Blas Infante, Padre de la Patria Andaluza es, aún hoy en día, el máximo exponente del Nacionalismo Andaluz y un ejemplo a seguir por todos los andaluces y andaluces que aman su Nación. Cuatro años después de su secuestro y asesinato y, para darle algún viso de "legalidad", el Tribunal de Responsabilidades Políticas creado después de la guerra le condena a muerte y a una multa económica a sus descendientes por, según un documento del 4 de mayo de 1940 escrito en Sevilla: "...porque formó parte de una candidatura de tendencia revolucionaria en las elecciones de 1931 y en los años sucesivos hasta 1936 se significó como propagandista de un partido andalucista o regionalista andaluz..." Aquel golpe de estado y aquellas balas fascistas acabaron, no sólo con su vida, también con la esperanza de un Estatuto de Autonomía para Andalucía cuando ya era inminente su aprobación. Callaron su voz, pero su obra y su pensamiento no. Vive en muchos de nosotros.

«Se mata a un hombre, pero no se puede matar una idea. Y Blas Infante fue la voz que encarnó una idea de Andalucía y la plasmó en un programa. Y este programa no fue nunca un instrumento de partido o de gobierno. Fue mucho más: una ética de la convivencia, un proyecto de redención y una esperanza de justicia para el pueblo andaluz. (...) Por ello, cuando la descarga final ahogó su grito de ¡ Viva Andalucía Libre ! , él esperaba que por cada gota de sangre derramada nacerían nuevas fuerzas para la libertad y la autonomía del pueblo andaluz.»

LACOMBA, Juan Antonio, "Málaga, Personajes en su historia".
Ed. Arguval. Málaga 1986 Leído en Andalucía: Documentos y Narraciones

sábado, agosto 9

Soldados de la Vida

El infinito roto 
«Mi nacionalismo, antes que andaluz, es humano. Creo que, por el nacimiento, la naturaleza señala a los soldados de la vida el lugar en donde han de luchar por ella. Yo quiero trabajar por la causa del espíritu en Andalucía porque en ella nací. Si en otra parte me encontrare, me esforzaría por esta causa con igual fervor.» 
(Manuscrito AEE) D. Blas Infante Pérez de Vargas - Padre de la Patria Andaluza
  (Casares, 5 de julio de 1885 – Sevilla, 11 de agosto de 1936)

Fotografía: El Infinito Roto 
Autor: Landahlauts

viernes, diciembre 14

Andalucismo en la diáspora



El pasado sábado 8 de diciembre se presentó en El Padul (en la Comarca del Valle de Lecrín) un libro que recoge la historia del andalucismo en Cataluña. Su título es "El Ideal de Blas Infante en Cataluña (Propuestas para una Historia del Andalucismo en la Emigración)".

Su autor es Francisco Garcia Duarte (Paco Albadulí): un paduleño que emigró hace muchísimos años a Catalunya, donde cursó sus estudios de Economía y desde donde nunca ha dejado de tener un contacto muy especial con su tierra. Participó en la creación del PSA en Catalunya y siempre ha estado muy vinculado con asociaciones andaluzas (fue el último Presidente de Almenara, por ejemplo). Colaboró en la Gran Enciclopedia de Andalucía del Siglo XXI (GEA) y es miembro del Centro de Estudios Históricos de Andalucia (CEHA).

El acto lo organizó en Ayuntamiento de El Padul, y se presentó en el Centro Cultural "García Lorca" durante las jornadas de la Feria de Muestras de la localidad. El libro ha sido editado por el Centro de Estudios Históricos de Andalucía, y presentado por su , Estanislao Naranjo Infante, junto al Alcalde, Manuel Alarcón. Estuvo arropado por multitud de amigos, entre ellos D. Enrique Iniesta Coullaut-Valera, José María López Blánquez...

El libro trata sobre la emigración andaluza a la Comunidad catalana, lo hace de un modo exhaustivo, pero muy ameno. Y, se dijo en la presentación, viene a contribuir a la fijación de una parte de la memoria histórica del pueblo andaluz, la de su emigración. En concreto la gran emigración que se produjo a Cataluña en la segunda mitad del siglo XX y las dificultades de esa parte del pueblo andaluz por mantener su identidad fuera de su tierra.

miércoles, octubre 31

Últimas palabras



Las últimas palabras y la actitud de personajes célebres, en un momento muy trascendental de sus vidas: el momento en que se acaban. Mostrándose cada uno, según su personalidad, según vivió.


Vividores:

"Muero como he vivido, por encima de mis posibilidades"



Satisfechos:


"Lo quisimos todo y lo conseguimos ¿no es verdad?"
Marlene Dietrich

"Ya he cumplido mi misión aquí"
Albert Einstein



Anunciando lo evidente:

"Me han dado"
John Lennon

"¡Carajo, un balazo!"
Antonio José de Sucre, tras recibir un disparo mientras cabalgaba en la jungla de Colombia



Románticos

"No llores, a mí me va a ir mejor y prepararé para ti un lugar en el paraíso celestial"
Bob Marley a su compañera Cindy



Batiendo récords absurdos:

"Me he bebido 18 vasos de whisky puro. Creo que es todo un récord"
Dylan M. Thomas, justo antes de entrar en un coma etílico



Ahorrativos:

"Apaguen la luz"
Theodore Roosevelt



Proféticos:

"Clemente, y tú también Felipe, traidores a la palabra dada, ¡os emplazo a los dos ante el Tribunal de Dios!... A ti, Clemente, antes de cuarenta días, y a ti, Felipe, dentro de este año...".
Jacques de Molay, ultimo maestre de la Orden del Temple, mientras era quemado en la hoguera. (Lo curioso del caso es que la maldición o profecía de Molay se cumplió. A los treinta y tres días de la ejecución de los templarios, moría el Papa (Clemente V) en el castillo de Roquemaure, posiblemente envenenado. El rey (Felipe IV de Francia), nueve meses después de la pira de Paris, fallecía misteriosamente mientras cazaba)



Perplejos:

"Dios mío, ¿qué pasó?"
Diana Spencer, princesa de Gales



Frustrados:

"He arado en el mar"
Simón Bolívar



Atisbando la gloria:

"¡Mozart!"
Gustav Mahler"



Derrotados:




Devolviendo lo que no es suyo:


"¿Por qué no?, despues de todo le pertenece"




Con un alto concepto de si mismos:

"Qualis artifex pereo" ("¡Qué gran artista perece!")
Nerón

"¡Qué pérdida irreparable!"
Augusto Comte



Faltos de sueño:

"Quiero dormir...
George Bernard Shaw



Tranquilizando a los demás

"Vete... estoy bien"
H. G. Wells



Patriotas:

"¡Viva Andalucía libre!"
Blas Infante, Padre de la Patria Andaluza, momentos antes de ser asesinado

"Per Catalunya!"
Lluís Companys , President de la Generalitat, antes de ser fusilado



Exquisitamente educadas:


"Pardonnez-moi, monsieur." (Discúlpeme, señor)

María Antonieta (Cuando se aproximaba a la guillotina, condenada a ser decapitada por traición, tropezó accidentalmente con el pie del verdugo)



Perplejos

"Das ist absurd! Das ist absurd!"(¡Es absurdo!...¡Esto es absurdo!)
Sigmund Freud



Trabajadores natos:

"Ocho horas con fiebre, ¡me habría dado tiempo a escribir un libro!"
Honore de Balzac



Hastiados:

"¡Es todo es tan aburrido!"
Winston Churchill



Negociando:

"Todas mis posesiones por un momento de tiempo"
Isabel I de Inglaterra



Poniéndolo fácil:

"No le dará ningún trabajo: tengo el cuello muy fino"
Ana Bolena, ex-esposa de Enrique VIII, antes de morir decapitada

jueves, mayo 31

La propia personalidad


«En nombre de España no se puede pedir que se deje de ser catalán, gallego o andaluz; por la misma razón que en nombre de la Humanidad, no se puede pedir que se deje de ser español, francés o británico; porque tanto equivale a exigir la abdicación de la personalidad originaria, en aras de una realidad que, ¡precisamente!, existe por el contraste de todas ellas».

Blas Infante (1885-1936)
Padre de la Patria Andaluza
«El Ideal Andaluz»

Fotografía: Landahlauts

miércoles, abril 11

Enrique Iniesta y la biografía de Blas Infante



Hoy miércoles, 11 de abril, será presentado el tercer libro sobre la biografía de Blas Infante, escrito por D. Enrique Iniesta Coullaut-Valera con el que culmina toda la obra y trayectoria humana del Padre de la Patria Andaluza.

Ha sido editado por la Editorial Almuzara. Será presentado por el escritor José Luis Serrano y el lugar será el pequeño museo que dedicado a Blas Infante, hay en las instalaciones del Colegio de los Ecolapios, en Granada. A las 20:30 hrs.

Este último libro versa sobre el periodo más intenso de la vida de Blas Infante, desde la República hasta su muerte.

Un lujo disfrutar de Enrique Iniesta esta tarde.

miércoles, marzo 7

Andalucía no ríe...




“Mienten quienes digan que Andalucía ríe. La risa de Andalucía es la mueca del genio enloquecido por el martirio, debilitado por el hambre; de un genio que tuvo y tiene por fondo un optimismo creador; una santa alegría de vivir, caricaturizado hoy por una larga tragedia de miseria y sufrimiento. Es cien veces más horrible que el llanto, la risa trágica de la degradación

Andalucía no ríe, llora. Llora al ver sus hijos, tambaleándose de hambre y de dolor, emprender el camino amargo que a la emigración conduce, buscando tierras que ella no puede darles, porque entre unos cuantos señores la esclavizaron...”


Blas Infante
Padre de la Patria Andaluza.

"Llanto" de Oswaldo Guayasamin

jueves, febrero 22

Advenedizos


"He visto entregada esta tierra a aventureros de la política, a advenedizos que hacen de ella asiento de su cretina vanidad y base de su mezquino interés. Los que hacen de la política una profesión exclusiva y excluyente (como una propiedad) suelen hablar de conflictos entre ideas y realidades. La diferencia entre ellos y nosotros es esta: para ellos, las realidades de un país son los intereses creados; para nosotros, las realidades de un país son los dolores creados por esos intereses."

domingo, febrero 18

Desde la Costa Oeste...



Hoy suena en La Arbonaida "Aunque diga Blas Infante", un pasodoble de "Los Yesterday" que fue Primer Premio en el 2º Certamen "Coplas para Andalucía" del año 1999.

Apareció ya, en La Arbonaida, pero por aquel entonces sólo la leían Bahtian (ese lector fiel) y pocos más.

Además hoy tenemos un doble motivo para que aparezca: es Carnaval y es un día muy importante para Andalucía (para bien o para mal).

Así que hoy, desde la Costa Oeste, desde la Tacita de Plata. autocrítica mordaz y ácida de los andaluces y por andaluces, que somos los que mejor nos entendemos. A pesar de que haya quien diga que no nos entiende ni la madre que nos parió.

Nada hay más sano en esta vida que reirse de uno mismo.


Lo puedes ver y oir aquí, creo que te gustará.

Los Yesterday - "Aunque Diga Blas Infante"
Primer Premio II certamen "Coplas para Andalucía" 1999

Aunque diga Blas Infante
"andaluces levantaos",
perdón que no me levante,
pero estoy mejón sentao.
Bueno, me vi´á poner de pie,
me vi´a´dejar de tonterías.
Venga, una, dos y tres:
"qué bonita Andalucía".
Vamos a ponernos serios,
que vamos a cantar el himno:
"Los andaluces queremos
volver a ser lo que fuimos"
... lo que fuimos antigüamente,
pobrecitos y vasallos,
siervos de terratenientes
y de chulos a caballo.
Si este pueblo se disparata
con la boda de una matavacas
y la niña de una duquesa...
Si este pueblo se le arrodilla
a una espada y a una mantilla,
este pueblo me da vergüenza.
Menos rollos de verdes mares,
de campiñas y de olivares,
que así luego nos luce el pelo.
Castas ...
después te ponen la serie de Emilio Aragón
pim, pom... con sus castas,
y aparece en el más ínfimo escalón
de su estrecha jerarquía,
el servilismo mamón
de las marmotas de Andalucía.
Letra y Música: Juan Carlos Aragón Becerra

viernes, febrero 2

"Yo, de política, no entiendo"


“No son hombres de bien los que se consagran por entero a sus hogares, sus bibliotecas o sus retiros, rehusando o despreciando la lucha por la Justicia. Son egoístas que huyen del fango por evitarse la repugnancia o el esfuerzo.(...). Son esa clase cobarde llamada neutra. Hablan de las debilidades de los hombres públicos sin haber contrastado su propia fortaleza y dejan los asuntos públicos a la incapacidad de los peores”

Autor: Blas Infante
Extraido de “Ideal Andaluz"
1ª ED., 1915, página 341

domingo, enero 14

Hemeroteca 0206

Hace un año aparecía La Arbonaida, comenzaba con unas palabras muy bellas de D. Blas Infante, el Padre de la Patria Andaluza. Era mi particular forma de izar simbólicamente mi bandera para inaugurar este foro de Paz y Libertad. Seguidamente mostraba mi Declaración de Intenciones, donde explicaba lo que pretendía que esto llegara a ser. Seguidamente explicaba el significado de mi alias o nick: Landahlauts... sino lo sabes, este es buen momento para enterarte. El siguiente post era ya para "meterme en faena" que dirían los taurinos, lo hacía con un comentario que aún hoy en día sigue creando mucha polémica en foros de discusión que lo enlazan, se titulaba Xarnegos Integrados. El siguiente post mostraba que la poesía tendría su hueco en La Arbonaida, en especial la poesía andaluza. Para ello creaba una sección titulada "El Cenador de la Poesía", nadie mejor para inaugurarlo que Luis Cernuda con un poema titulado Quisiera estar solo en el sur. La semana acabó con una reflexión sobre mi visión de la educación en la actualidad: El Imperio de los Mediocres y con una visión humorística sobre el mismo tema (Evolución de un Problema Matemático). Eso dió de si la primera semana de La Arbonaida. Espero que este repaso os sirva para curiosear en la hemeroteca.

miércoles, noviembre 22

El PRI Andaluz.

El PSOE se hizo fuerte en Andalucía mediante un aprovechamiento muy inteligente de la fuerza del pueblo andaluz. No creía en Andalucía, pero optó, como lo ha hecho siempre en su historia, por ponerse al frente de la manifestación cuando ésta es imparable.
Lo hizo el 28 de Febrero, cuando tembló ante el 4 de Diciembre, cuando uno de los suyos se puso en huelga de hambre (el presidente socialista Rafael Escuredo)por defender la dignidad andaluza, cuando hasta desde la derecha (el ex ministro de UCD Manuel Clavero Arévalo) hubo quien prefirió dimitir antes que asumir la afrenta a Andalucía.
El nuevo Estatuto andaluz es otro ejemplo de esa política de aprovechamiento, de rapiña, de utilización bastarda del sentimiento y los intereses andaluces.
Los más viejos aún recuerdan que los socialistas que conocían la figura de Blas Infante le llamaban "la momia", y a la bandera andaluza "el trapo", y hasta en algún congreso en los inicios democráticos Guerra pidió que la quitaran. Siguiendo la tradición, cuanto más poder tienen los andaluces en Madrid, menos poder tiene Andalucía. Felipe González y Alfonso Guerra son andaluces, y ninguno ha hecho nada por Andalucía en el proceso de elaboración de su nuevo Estatuto. Es especialmente doloroso el caso de Guerra que tragando kina apoyó el Estatuto que reconocía indirectamente a Cataluña como "nación", pero que no le ha costado nada dejar a Andalucía por debajo de Cataluña. Gracias. Un ejemplo de la visión que tienen los socialistas de nuestra tierra es lo que ha pasado con el reconocimiento de Andalucía como nación. Primero dijeron que de eso nada de nada, pero ante la indignación de ciudadana de un lado (no por el término, que aquí el nacionalismo es mínimo, pero sí por la clara idea de que otra palabra nos colocaría en desigualdad respecto a Cataluña) y ante el miedo de quedarse solos (PA e IU pedían el término "nación" y el PP se quedaba fuera de esta historia), vuelve a optar por ponerse al frente de la manifestación, como aquel 28-F. Piensan en la expresión ya mencionada de "realidad nacional", que atribuyen a Clavero Arévalo (que lo había recabado del Manifiesto de la Nacionalidad) que en la Constitución se refleja como "nacionalidad", pero luego les da igual cambiarla por otra redacción que desvirtúa totalmente el contenido de la negociada con IU. Da igual. No importa. No creen en Andalucía cuando sus diputados son capaces de votar en el Congreso para Cataluña cosas que no votan para Andalucía. ¿Que Cataluña es una nación? ¿Y porqué Andalucía no? Quizá porque tras un cuarto de siglo gobernando, los niños andaluces no tienen ni idea de quién era Blas Infante, de que la bandera de Andalucía es la más antigua de Europa y fue descrita por vez primera por un almeriense, que la lucha por el autogobierno tiene más de un siglo de historia... Y en cuanto a la financiación, basta decir una cosa para que cualquier andaluz lo entienda, y es un máxima que se puede repetir en todo: Si CiU y ERC han votado en el Congreso a favor del Estatuto andaluz es porque el sistema de financiación que plante para nuestra tierra, les parece bien, y si a ellos les parece bien... no me cabe la menor duda de que no nos beneficia. Otra traición más. Suma y sigue. Insisto, no trato de argumentar si Andalucía es o no una nación, sólo dejar en evidencia que el PSOE no cree esta tierra, en este país, que nos usa, y eso es muy triste, muy triste. La traición del PSOE a Andalucía Rafael M. Martos Blog del Director del Diario de Almería.

jueves, noviembre 9

Manifiesto Andalucista de Córdoba de 1919

Texto acordado por el Directorio Andaluz de Córdoba el día 1º de Enero de 1919 y refrendado por la Asamblea Autonomista reunida en Córdoba el 25 de marzo del mismo año.
A los representantes en Cortes, Diputaciones provinciales, Ayuntamientos, Universidades, Institutos y Escuelas, Centros Obreros, Museos, Cámaras y Asociaciones Culturales, Agrícolas, Industriales y Comerciales y a todos los habitantes del territorio andaluz: Ciudadanos andaluces: Nuestra voz quiere llenar de imperativos de vida clamorosa y palpitante el silencio de muerte de vuestras conciencias calladas; quiere fundir los espíritus de todos vosotros en un poderoso vibrar inspirado por nuestra permanente afirmación. Sentimos llegar la hora suprema en que habrá de consumarse definitivamente el acabamiento de la vieja España, la cual va a desvanecerse como una sombra antes de que concluya este instante solemne de la vida mundial: puente entre la eternidad de un pasado de locura, manchado de sangre y vestido de artificio, y la eternidad de un porvenir consciente de la finalidad creadora de la vida universal, a cuyo cumplimiento se ordenarán, con intensos fervores, las eficiencias puras de las energías humanas. Ante el fatal advenimiento de esta hora decisiva, nosotros queremos intensificar en este territorio yermo y silencioso, cementerio que pueblan espíritus apagados, nuestra labor creadora de un pueblo vivo, bullicioso y feliz, que irradie con su actividad potencialidades progresivas para las nuevas eras. Nosotros, conscientes de nuestra misión vital, invitamos fervorosamente a todos los andaluces a que, recordando como un acicate su gloriosa historia, no de guerras, sino de maravillosas civilizaciones pasadas, colaboren en la batalla nuestra; a que sientan un anhelo intenso y poderoso de la vida propia y distinta, considerándose cada individuo factor activo de la Historia nueva; a que fundan, sin temor al sacrificio, ese anhelo de eternidad que constituye el fondo último de todos los seres, con el objeto de una posteridad triunfante, la cual únicamente podrá perpetuar la vida nuestra, depurada por el dolor, dignificada por la libertad y santificada por la justicia. Para esto requerimos a todos los habitantes de Andalucía, a fin que proclamen y de que vehemente defiendan los fundamentos siguientes: Primero: Abolición de los Poderes Centralistas. La necesidad de mantener y de fomentar a todo trance la general tensión alcanzada por los espíritus de todos los españoles durante los sucesos de junio y agosto de 1917 y durante los de marzo de 1918, así como la creada posteriormente con motivo de los últimos acontecimientos políticos nacionales, aspirando a una renovación integral de la vida española. Desperecemos del todo nuestro sueño secular. Hemos entreabierto los ojos unos instantes, entreviendo horizontes de dignificación. Hemos sentido varias veces una salvadora expectación, antecedente de una revolución purificadora. No volvamos a dormirnos en la abyección de nuestra existencia pasada. Todos los pueblos del mundo han sentido desgarradas sus entrañas y han producido dolorosamente una vida nueva. Desgárrese también la vieja España. Seamos fuerzas impetuosas, elaboradoras, en la interna agitación de una nueva vida hermana a la que va a triunfar en el mundo. Sean cuales fueren los procedimientos de que hubieren de valerse para mantener su dominio los Poderes Centralistas depredadores, estos Poderes deberán, con escarnio, ser abolidos. Declaremos a los representantes del régimen actual y sus procedimientos, incompatibles en absoluto, por su inconsciencia e inaguantable contumacia con las aspiraciones generosas de renovación. Una barrera impenetrable de intereses políticos o partidistas y plutocráticos, consustancial de la conservación de dinastías arcaicas y de oligarquías inmundas, impide el advenimiento de las nuevas condiciones, contradictorias de absurdos privilegios. Rechacemos la representación de un Estado que nos deshonra, sosteniendo regímenes arcaicos y feudales en todos los órdenes de la Administración: en la Hacienda, en la Enseñanza, en la Justicia; Poderes que mantienen Códigos sancionadores de bárbaras costumbres privadas, por los cuales la sociedad salvaje de este territorio ejerce una tiranía espiritual mil veces peor que la económica y que la política, sobre los hombres cultos que se preguntan si este país es una patria o un establo. Declarémonos separatistas de este Estado que, con relación a individuos y pueblos, conculca sin freno los fueros de justicia y del interés y, sobre todo, los sagrados fueros de la libertad; de ese Estado que nos descalifica ante nuestra propia conciencia y ante la conciencia de los pueblos extranjeros. Avergoncémonos de haber sufrido y condenémoslo al desprecio o al perecimiento; esto es, al vacío del olvido absoluto en donde el recuerdo del malo se extingue, a esas castradas generaciones antecedentes, que nos hubieron de legar la deshonra de este Estado, por no haber concebido ni ejecutado en su inconsciencia, en su cobardía o en su maldad, el esfuerzo generoso que exigía de ellas la esperanza de una posteridad feliz. Reneguemos de los padres que despreciaron a los hijos, viviendo con la España antigua la historia estéril para el progreso humano de un pueblo inspirado por dogmas sombríos de muerte, que hiciera cruzada contra la naturaleza y la vida, forjando para España y para los españoles de hoy la prevención y el menosprecio universales. Hay que romper la secular barrera y hay que romperla ahora o nunca. Ved que, con ser ínfima la cultura y la capacitación del pueblo, es mucho menor la de los hombres representantes de los regímenes que imperan. Rechazad la tiranía del interior, la más degradante de las tiranías. Segundo: Andalucía, libre. En todas las regiones o nacionalidades peninsulares, se observa un incontrastable movimiento de repulsión hacia el Estado centralista. Ya no le vale resguardar sus miserables intereses con el santo escudo de la solidaridad o unidad, que dicen nacional. Aún las regiones que más aman la solidaridad, como sucede a Andalucía, van dándose cuenta de que los verdaderos separatistas son ellos: los que esparcen recelos con relación a pueblos vivos, como Cataluña o Vasconia, por el delito horrendo de querer regir por sí sus peculiares intereses. ¿ Qué diríais de un individuo o de una familia o de un pueblo cualquiera, que afirmara su voluntad de vivir, de regir su patrimonio, de usar de su propia lengua, de dictar reglas privadas para el gobierno de su propio hogar y que afirmara al mismo tiempo su deseo de solidarizarse con los demás individuos, familias, ciudades o pueblos, manteniendo la unidad o la sociedad para los fines sociales, como la representación exterior, como los servicios y negocios que no sólo a unos de ellos, sino que a todos por igual afectan?. ¿Ibais a ser tan dementes que llamaseis al individuo o pueblo que así obrara, egoísta, criminal o antisolidario?. Pues esto hacen hoy los centralistas con las regiones que quieren desarrollar su propia vida fuera de la acción negadora de un Estado incapaz. El Estado oligárquico las ataca, porque precisamente esas regiones quieren proceder a la reforma de su organización para hacer compatible la libertad y el derecho de todos y para estar representados todos dignamente. Del mismo modo calumniaron y vejaron también, esos Poderes, a Portugal, y Portugal huyó fuera del seno de la familia hispana. Esto hicieron con la América del Sur y la América del Sur repugnó la solidaridad, sustrayéndose a la tiranía de la metrópoli; esto hicieron con Cuba y Cuba buscó apoyo contra España en la libre Norte América; esto quieren hacer ahora con las regiones que llaman separatistas; enconando con respecto a ellas, odios y diferencias afectivas, antecedentes del disgregamiento. A un individuo se le encierra en una prisión y, como pueda, de ella se escapa; a una familia, como sucede en nuestros municipios andaluces, se la persigue por el cacique, se le niegan los medios de vivir con justicia y dignidad y se alejará, como tantas se alejan, maldiciendo del municipio, de la manada de hombres cobardes que tales crímenes conscientes. Con este procedimiento se desintegrarán todas las nacionalidades vivas de Hispania. No podrán contener sus ansias de libertad la acción opresora de los poderes centrales, porque éstos ninguna esencia representan y los nacionalistas de todas las regiones van movidos por una fervorosa esencia de liberación, siendo impotentes las armas y los ejércitos todos ante la fuerza avasalladora, incontrastable, que expansiona los ideales de liberación oprimidos. Andalucía quedará sola. Las demás nacionalidades van afirmándose y Andalucía se verá también en la necesidad de vivir por sí; es decir, de procurar su propia vida y progreso, si no quiere ser vilipendiada más que lo fuera hasta ahora. Andaluces: Andalucía es una nacionalidad porque una común necesidad invita a todos su hijos a luchar juntos por su común redención. Lo es también porque la Naturaleza y la historia hicieron de ella una distinción en el territorio hispánico. Lo es también porque, lo mismo en España que en el extranjero, se la señala como un territorio y un pueblo diferente. La degeneración de Andalucía será la de todos vosotros. Un pueblo abyecto y cobarde es un mero compuesto de individuos indignos y cobardes también. Nosotros, por esto, estamos fundidos con aquella expresión de la Asamblea Regionalista de Ronda que proclamó a Andalucía como una realidad nacional, como una patria (patria es un grupo humano que siente las mismas necesidades y ha de trabajar por satisfacerlas en común), como una patria viva en nuestras conciencias. Por eso también, queremos hacer efectiva la prescripción del artículo primero de la Constitución Andaluza, votada por la Asamblea Federalista de Antequera de 1883, que aspiró a constituir en Andalucía “una Democracia Soberana y Autónoma”, la cual subvenga exclusivamente a las necesidades desatendidas de este territorio y al progreso particular de sus habitantes. Por eso nos hemos determinado a dirigir a los Poderes Centrales la siguiente petición: Los que suscriben, interpretando las aspiraciones de los andaluces conscientes, los cuales no se encuentran representados por las Diputaciones y los Ayuntamientos andaluces, Municipios caciquistas, granjas de los oligarcas de Madrid, al Presidente del Consejo de Gobierno, con todo respeto, piden: 1º. - Que al reformar la Constitución española en sentido autonómico, no se prive de este Derecho a la Región Andaluza, a la cual deberá otorgársele una soberanía igual en la intensidad a la solicitada por la Mancomunidad catalana, en su mensaje último al Gobierno. 2º. - La facultad de constituirse en Democracia autónoma, ordenadamente, organizando sus Poderes legislativos, Ejecutivo y Judicial, siguiendo para ello la orientación sugerida por la constitución para Andalucía tomada en consideración por la Asamblea Federalista de Antequera de 1883 y por la Asamblea regionalista de Ronda de enero de 1918, en la forma que acuerde una Asamblea, convocada al efecto, de los Municipios andaluces, integrada por representantes elegidos por sufragio directo. No se rechace por extemporánea esta petición, arguyendo que no está Andalucía capacitada para usar su libertad. Este es el argumento que se usaba para defender la permanencia de la esclavitud individual, alegando que los esclavos no estaban capacitados para ser hombres libres. No habiendo sido jamás Andalucía entregada a sí misma desde la conquista y dominación cristiana que vino a absorber nuestros jugos vitales y a esterilizar nuestro genio creador, no puede decirse que sea Andalucía incapaz de regirse bajo las nuevas condiciones. Cuantas veces fue libre, creó nuestra Región las únicas maravillosas civilizaciones que existieron en España. En su último período de libertad, el Andaluz salvó de la barbarie europea la cultura occidental e inspiró a Europa la civilización con que cuenta hoy en el mundo. No se conteste que para conceder la autonomía a este Región, necesitaría tener primero conciencia de su personalidad. La personalidad de Andalucía, no obstante la negación que de ella hiciera la bárbara dominación, se destaca hoy más poderosamente que la de ninguna otra nacionalidad hispánica. Para tener conciencia o visión clara de su personalidad sólo necesita de soledad para sentirla, de facultades para liberarlas. Andalucía no es un pueblo de locos y de imbéciles incapacitados. Su incapacidad no es más que el yugo caciquil a la que la oligarquía de Madrid la somete, impidiéndole pensar en una capacidad que no habría de poder ejercer bajo el yugo del cacique que Madrid le impone. La tiranía económica y política que se hubo de desarrollar desde la conquista de este pueblo, no puede parangonarse con la que pasó sobre pueblo alguno del mundo. Los andaluces oprimidos perdieron la esperanza de su libertad y aún se olvidaron de ella. Pero esto no quiere decir que, si llega el caso de ejercerla, no puedan demostrar los que después de tiranizados, vilipendiados fueron, que, si hubo un pueblo creador en España, este pueblo fue el de Andalucía, como lo patentiza su historia, enterrada por los dominadores y desenterrada hoy por muchos de sus hijos entusiastas, los cuales se sienten inspirado por la grandeza de la región. 3º.- La facultad de dicha Asamblea constituyente para poder conceder a los Municipios andaluces la autonomía más amplia. No creemos a los Poderes Centrales hoy constituidos, capacitados para variar el régimen de organización general, por lo cual, en forma alternativa, para el caso de que así se entienda por el Gobierno, pedimos que éste, dándose cuenta de su situación y del peligro que para la futura federación hispánica supondría la concesión de autonomías singulares o la actitud de ciertas nacionalidades, quienes justamente habrán de tomar por si la libertad que se les niega, aconseje al Poder Regulador la convocatoria de Cortes Generales, en las cuales, representadas todas las regiones, puedan pactar la federación española. Córdoba, a 1 de enero de 1919. Todos los andaluces deben adherirse a esta petición, bien dirigiéndose a los Poderes Centrales directamente, bien remitiéndonos su adhesión. Cuando os inciten a luchar contra las regiones hermanas, luchad por la libertad de Andalucía. Queremos libertad porque los Poderes Centrales jamás resolverán nuestros urgentes problemas. Planteados y resueltos los tenemos en nuestra Constitución de 1883. Queremos resolver el problema del hambre en Andalucía, convirtiendo al jornalero en labrador y concluyendo con el latifundio y la barbarie de los terrenos por cultivar. Para esto, conforme a lo votado por la Asamblea Regionalista de Ronda, aspiramos a absorber en beneficio de la comunidad municipal el valor social del suelo, negando la propiedad privada de dicho valor; constituyendo con él la Hacienda natural del Procomún, asegurando la permanencia en la posesión privada de los cultivos, edificaciones y mejoras de los terrenos y librando de toda contribución o gravamen dichos cultivos, edificaciones o mejoras, así como toda manifestación del trabajo individual sobre las tierras. Queremos que cada Municipio tenga la obligación de mantener un establecimiento de intermediación comercial de los artículos de consumo, el cual, sin perjuicio de las iniciativas privadas, vendrá a socializar así esta manifestación de la actividad, establecimientos que constituirán como cooperativas municipales de consumo. Queremos que los Municipios exploten por sí empresas de todo orden, agrícola e industriales, sosteniendo granjas y montando fábricas y talleres, dejando libre la iniciativa individual para el que quiera emplearla en estos fines. Por la municipalización del valor social del suelo y el establecimiento forzoso de cooperativas municipales de comercio y por la explotación de empresas y entidades agrícolas municipales vendríase a operar la socialización de todas las actividades, sin perjuicio de la iniciativa particular, que podría seguir desarrollando sus potencialidades. Imposible sería a un particular competir con una empresa municipal, por lo cual se operaría la socialización y quedaría al mismo tiempo libre la actividad particular y, por tanto, con incentivo para explorar los campos nuevos. Esta solución armoniza todas las creencias y es la verdadera orientación que es necesario seguir para resolver los que se consideraban insolubles problemas sociales, los cuales vendrían a quedar reducidos a problemas de administración. Queremos excitar el nacimiento de la conciencia colectiva municipal y concluir con el ominoso caciquismo: 1º. - Por la libertad económica, que vendrá como consecuencia de la aplicación de las anteriores prescripciones. 2º. - Por el establecimiento del sistema de democracias puras suizo, consagrando el derecho de petición y las iniciativas de los vecinos: por la obligación general de todo Ayuntamiento andaluz de discutir los asuntos importantes del Municipios en lugares como plaza publica, con turnos de intervención y discusión para el pueblo. 3º. - Por la autonomía de cada pueblo o municipio, incluso para dictar, con sólo las anteriores limitaciones y el respeto a los derechos individuales, sus respectivas constituciones políticas y sus leyes electorales. Queremos crear en cada cabeza de partido andaluz, escuelas prácticas de Artes, de Agricultura y de Ingeniería, en armonía con las necesidades de la Región. Queremos dotar de absoluta autonomía a los Centros de Enseñanza; instrucción gratuita en todos sus grados y la enseñanza obligatoria impuesta son severas sanciones. Queremos que el Estado Regional mantenga un ejército de maestros y profesores, con pensiones periódicas en el extranjero, los cuales sirvan las escuelas y Centros docentes de la Región, aportando a ellos los alientos civilizadores de Europa. Queremos que el Estado Regional mantenga un ejército de médicos e higienistas, que cuiden de la salud de los necesitados y velen por la salubridad de los municipios y de la Región. Queremos la reforma de los Códigos arcaicos españoles, amoldándolos al carácter andaluz y a la expansión de los espíritus libres. Queremos dignificar a la mujer esclavizada por un bárbaro Derecho que tuvo en Roma su inspiración y que repugna al genio humano y generoso de Andalucía, la cual, cuando fue libre, aún bajo el régimen musulmán, dotó a sus mujeres de consideraciones, libertad y respectos similares a los que hoy gozan en los países más progresivos del mundo. Queremos reconocer conforme los artículos 14 y 15 de dicha Constitución, la independencia civil y social de la mujer. Toda subordinación que para ella establezcan las leyes quedará derogada desde la mayoría de edad. Queremos la justicia gratuita y la derogación de las leyes procesales civiles actuales y su sustitución por el arbitraje obligatorio y el establecimiento de un cuerpo de Magistrados asesores, encargados de los Registros civiles de personas o cosas. Queremos el establecimiento de los Poderes Legislativos, Ejecutivo y Judicial, conforme a lo prescrito en dicha Constitución, a saber: Cámara legislativa compuesta de diputados de población y profesionales o de clase. Ministros designados por el Parlamento. Poder Judicial independiente, a cargo de un Tribunal Supremo. Andaluces: Para esto queremos nuestra libertad; para hacer de Andalucía un pueblo como siempre fue; el más civilizado y feliz de Europa, el cuerpo de ejército más esforzado de los creadores de la civilización o de la vida. Tercero: La Federación Hispánica. Con ello ganará Andalucía e Hispania. Amamos la hermandad con todas las nacionalidades peninsulares, incluso Portugal, que sólo formarán con las demás una potente supernación, cuando todas ellas sean libres dentro de la unidad; como lo son los Estados alemanes, dentro de la Federación alemana; como lo son los Estados americanos dentro de la Federación de los Estados Unidos de la América del Norte; o de los Cantonales suizos dentro de la libre Federación helvética. Libertad y Federación, para el fin progresivo de todos los pueblos del mundo. La consagración de este principio ha sido el alumbramiento gigantesco de la guerra mundial. Ved que no puede existir unidad o solidaridad sin amor, ni amor sin respeto mutuo o libertad. Ved que la España uniformista nació muerta porque se fundó sobre la negación de los jugos vitales privativos de las nacionalidades hispanas, que constituyeron el alma potente de la España federada. Desde entonces, desde hace cuatro siglos, la nacionalidad española fue una sombra de nacionalidad, flotando sobre un territorio inerte, inicuamente explotado por dinastías extranjeras, con la rapaz colaboración de caciques y de oligarcas. Andaluces de todos los campos y partidos: Venid a esta labor, los hombres de ideas más opuestas, unidos por el ideal de una Andalucía grande y redimida. Invocamos a todas las clases, principalmente a las obreras, que tienen la fuerza reformadora del Poder a la orden de su voluntad; a todas menos a una pseudo intelectualidad andaluza y española, de espíritu castrado y de alma cobarde, que abdicó el rango de clase dirigente y sólo sirve para entorpecer la ideación generosa y la valiente acción. Y decimos a las clases acomodadas: Ved que en el orden político y social ofrecemos ordenadamente los avances de una fatal evolución. Ved que el hambre del pueblo ruge; que su organización está ya operada en casi todos los pueblos andaluces; que todos los obreros se encuentran ya asociados por la intensificación en estos últimos tiempos del hambre y de las nuevas auras de liberación. Si no os apresuráis a hacer justicia, llegará el día luctuoso en que se liberarán rencores en ineluctables venganzas. Y decimos a los obreros: El último Congreso Socialista ha votado la defensa de las autonomías regionales y locales y del principio federativo. La democracia trabajadora de Oriente, organiza la República federal rusa, constituida sobre la base de la libre federación de las regiones o nacionalidades, organizadas en soviets regionales y locales. Sindicalistas: Venid a defender con la liberación de la Tierra el medio único que tenéis de ensayar su explotación por los sindicatos obreros y con los establecimientos de intermediación mercantil municipal, el medio único que también existe de explotar esta manifestación de la actividad humana en beneficio de todos, por lo que vendría a ser un Sindicato municipal. Vengan los obreros, sobretodo los campesinos, a defender la aplicación del sagrado principio de tierra y libertad. Nuestra voz convoca principalmente a los rudos pastores de las serranías para que vengan a formar el ejército liberador de Andalucía, con los famélicos de las campiñas acotadas. Campesinos andaluces: Sois los conductores de la Andalucía pura en las ciudades se vino a mezclar su sangre con la de extraña gente. Vuestra historia es la historia de Andalucía. Vuestros padres, hicieron de esta triste patria nuestra un vergel delicioso, en donde los más deleitosos frutos estaban de balde; en donde todo el mundo sabía leer y escribir, presidido este vergel por la gloriosa ciudad desde donde os dirigimos nuestra voz: por Córdoba, la ciudad que condensó el espíritu andaluz, acumulándole en ochenta Universidades y Bibliotecas ingentes, como no existen en la España de hoy; prodigándolo generosamente a Europa, cuya civilización vino a iniciar. De aquí salió el espíritu que fundó las Universidades europeas. Aquí la civilización tuvo asilo inexpugnable, acosado por la barbarie medieval. Y vino esta barbarie a dominar por fin a Andalucía. Y, entonces, los dominadores se repartieron en grandes porciones el suelo de la patria y expulsaron a nuestros padres, generosos y creadores, a las playas inhospitalarias del África hosca y redujeron a los que quedaron a abdicar su genio rebelde y creador, encerrándole como esclavos en esas ergástulas que llaman gañanías, en donde pena aún su martirio la Andalucía jornalera, la verdadera y triste Andalucía. Los caciques territoriales y políticos, por medio de la desamortización, por medio de contribuciones, vinieron a completar la obra de arruinar al pequeño labrador que cultivaba intensamente sus tierras, creándose así, junto a los estados de los nobles, los modernos latifundios. Mienten quienes digan que Andalucía ríe. La risa de Andalucía es la mueca del genio enloquecido por el martirio, debilitado por el hambre; de un genio que tuvo y tiene por fondo un optimismo creador; una santa alegría de vivir, caricaturizado hoy por una larga tragedia de miseria y sufrimiento. Es cien veces más horrible que el llanto, la risa trágica de la degradación. Andalucía no ríe, llora. Llora al ver sus hijos, tambaleándose de hambre y de dolor, emprender el camino amargo que a la emigración conduce, buscando tierras que ella no puede darles, porque entre unos cuantos señores la esclavizaron; llora cuando percibe a sus niños jornaleros que atisban con ansia un pedazo de pan, consumida la niñez en las rudas faenas del campo; llora cuando contempla a sus mujeres jornaleras, implorar en los hogares desolados, guaridas de la miseria y de la muerte, en los tristes días de invierno, y a sus evocaciones no se responde con el alimento que la prostitución les dona por la mano de señoritos casineros, dueños de la tierra y herederos de los nobles haraganes; llora cuando les ve deformándose los cuerpos juveniles en bestiales faenas campesinas, impropias aún de hombres fuertes; llora cuando cuenta el noventa por ciento de su población esclavizada por el bárbaro latifundio; cuando en ese noventa por ciento de jornaleros, ella misma se contempla, humillada y hambrienta, en la sucia gañanía. Dicen que los cantares andaluces son evocaciones a la muerte: ¿qué otro refugio que la deshonra y la muerte dejaron a esta diosa excelsa humillada, que se llama Andalucía?. Andalucía no ríe: llora. Los españoles no lo ven; los extranjeros sí. Campesinos andaluces: El escándalo de vuestra existencia miserable ha pasado la frontera y, pregonado por escritores extranjeros, es la vergüenza más trágica de España y de Andalucía. ¡Arriba los corazones!. ¡No emigréis, combatid!. La tierra de Andalucía es vuestra. ¡Recobrad la tierra que vino arrebataros la dura dominación!. ¡Perezca la gañanía y tenga Andalucía un hogar riente y feliz en la granja limpia de los estudiosos campesinos!. Sois vosotros los que habéis de redimiros. Vuestra redención es la de la patria nuestra. Organizaos al requerimiento de nuestra voz. No os constituyáis en banda desorganizada, sino en ejército regular. Andaluces todos: La hora ha llegado de reanudar vuestra interrumpida historia. Andalucía es Bética que produjo para la humanidad los mejores hombres de ciencia y los emperadores más humanos y filósofos; es el Andalus que salvó la civilización del mundo, creada por la primitiva Andalucía. Sed dignos de la grandeza pasada. Organizaos, y como los andaluces de 1835, por la Junta Regional de Andújar, imponed la reforma de los Poderes Centrales españoles; tomaos vuestra propia libertad; acordar las medidas de vuestra propia redención y sed el pueblo más eficiente en los Estados Unidos de España. Sea vuestro grito de combate y de victoria: ¡Por Andalucía, por España y la Humanidad!. Córdoba, 1 de enero de 1919. Blas Infante.- Por el Centro Regionalista Andaluz de Jaén: Inocencio Fé, Emilio Alvárez, Juan García Jiménez, Manuel Rosi (Secretario). Por el Centro Regionalista Andaluz de Córdoba.- Dionisio Pastor, Eloy Vaquero, Francisco Azorín, Francisco Córdoba. - Texto acordado por el Directorio Andaluz de Córdoba, el día 1º de Enero de 1919 y refrendado por la Asamblea Autonomista reunida en Córdoba el 25 de marzo del mismo año.

miércoles, octubre 25

Aviso a navegantes



"Andaluces: Andalucía es una nacionalidad, una realidad nacional (...) La personalidad de Andalucía (...) se destaca hoy más poderosamente que la de ninguna otra nacionalidad hispana".
Manifiesto de Córdoba. Redactado por Blas Infante, 1 de enero de 1919.

domingo, octubre 15

Andalucía sí paga traidores.

Parlamento de Andalucía
Estamos en el último empujón del debate sobre la denominada reforma del Estatuto de Autonomía para Andalucía, y lo que estamos viendo en Madrid sólo es un remedo de la traición que los políticos andaluces están consumando contra quienes les eligieron. La mayoría del Congreso de los Diputados está formada por andaluces, andaluces que están dispuestos a anteponer sus cortos intereses de partido a los intereses de Andalucía, y por supuesto a los intereses de España. El asunto de la denominación de Andalucía que tanta tinta ha hecho correr no es ninguna tontería. Lo triste es que nadie ha mirado más allá de sus propias narices políticas a la hora de apostar por una u otra calificación. Así, son ridículas las salvedades que pone el PP ante la expresión "realidad nacional" que aparece en el preámbulo, ya que en ese mismo texto la palabra "España" y "nación española" está presente casi tantas veces como "Andalucía", y por si fuera poco se ponen permanentes referencias a la Constitución y su contenido. Si a esto añadimos que los andaluces no son mayoritariamente independentistas, es un poco absurdo querer seguir colgando salvaguardas a la "unidad de la nación española" de nuestro Estatuto. Pero no es menos absurdo escuchar al PSOE defender el término "realidad nacional", cuando no creen que Andalucía sea una nación. Si no es una nación, no puede ser una realidad nacional, ¿o es que las palabras están vacias de sentido?. Por si eso fuera poco, resulta que apuntan a que esta expresión, la de "realidad nacional", es del ex ministro de la UCD Manuel Clavero, cuando en realidad ya aparece en el Manifiesto Andalucista de Córdoba, firmado entre otros muchos por Blas Infante, y en el que se planteaba si no había llegado ya el momento de separarnos de España. Más allá de esto es el rídiculo que hace IUCA. No saben ni qué quieren ni qué son, ni ellos ni Andalucía. Hablan de la "nación" con el único fin de asimilarnos a los niveles de autonomía que puedan tener Cataluña o Euskadi, pero no porque en realidad crean que Andalucía es una nación. Si resulta que están dispuestos a aceptar menos autogobierno que otros territorios con tal de mantener el pacto con el PSOE para que el PP se quede fuera, entonces a IUCA no le queda nada que defender. Los del PSA acatan el concepto de "realidad nacional", que entiende que es mejor que nada. Los del PA quieren o "nación" o nada. En ambos casos sus argumentos tienen sentido, pero les pesa su estrategia electoral. El PSA que en las pasadas elecciones municipales no tenía ni un euro para campaña, en estas va de sobrao, y algunos nos preguntamos si el motivo no estará por ejemplo en su postura con el Estatuto, es decir, si el PSOE no está impulsándolo para que sea su apéndice. Respecto al PA, hay que decir que llega tarde -quizá demasiado tarde- a defender de modo radical su propia identidad política: el nacionalismo. Ese es el panorama básico. Es cierto que hay más cosas, algunas tan importantes como la financiación y otras tan absurdas de incluir en un Estatuto autonómico como el testamento vital. La financiación está sometida a los intereses del PSOE, y así no es raro encontrarse con que los socialistas estaban dispuestos a tratar con el sistema que les impusieran -si beneficia a Cataluña perjudica a Andalucía, es así de claro- pero necesitaban la coartada de otros partidos, y de ahí el juego con la identidad nacional andaluza. No usan. Nos manosean. ¿Pero dónde está el debate en los medios de comunicación sobre la reforma del Estatuto? ¿dónde está aunque sólo sea en los medios públicos andaluces? Ellos lo están haciendo allí, en Madrid, y todos reconocen públicamente que el texto que están elaborando allí, en Madrid, nada tiene que ver con el que salió de Andalucía. Y mira que el que salió de Sevilla era como para echarle de comer aparte. Posturas ante el Estatuto Andaluz De: Rafael M. Martos Director del Diario de Almería

viernes, octubre 6

Blas Infante: Esperanza de Libertad.

"Se mata a un hombre, pero no se puede matar una idea. Y Blas Infante fue la voz que encarnó una idea de Andalucía y la plasmó en un programa. Y este programa no fue nunca un instrumento de partido o de gobierno. Fue mucho más: una ética de la convivencia, un proyecto de redención y una esperanza de justicia para el pueblo andaluz. (...) Por ello, cuando la descarga final ahogó su grito de ¡ Viva Andalucía Libre ! , él esperaba que por cada gota de sangre derramada nacerían nuevas fuerzas para la libertad y la autonomía del pueblo andaluz."

LACOMBA, Juan Antonio, "Málaga, Personajes en su historia".
Ed. Arguval. Málaga 1986 

viernes, septiembre 8

La Dignidad de Andalucía.

"Declarémonos separatistas de este Estado que, con relación a individuos y pueblos, conculca sin freno los fueros de justicia y del interés y, sobre todo, los sagrados fueros de la libertad; de ese Estado que nos descalifica ante nuestra propia conciencia y ante la conciencia de los pueblos extranjeros. Avergoncémonos de haber sufrido y condenémoslo al desprecio o al perecimiento; esto es, al vacío del olvido absoluto en donde el recuerdo del malo se extingue, a esas castradas generaciones antecedentes, que nos hubieron de legar la deshonra de este Estado, por no haber concebido ni ejecutado en su inconsciencia, en su cobardía o en su maldad, el esfuerzo generoso que exigía de ellas la esperanza de una posteridad feliz. Reneguemos de los padres que despreciaron a los hijos, viviendo con la España antigua la historia estéril para el progreso humano de un pueblo inspirado por dogmas sombríos de muerte, que hiciera cruzada contra la naturaleza y la vida, forjando para España y para los españoles de hoy la prevención y el menosprecio universales. Hay que romper la secular barrera y hay que romperla ahora o nunca. Ved que, con ser ínfima la cultura y la capacitación del pueblo, es mucho menor la de los hombres representantes de los regímenes que imperan. Rechazad la tiranía del interior, la más degradante de las tiranías."
Extraido del Manifiesto de Córdoba de 1 de Enero de 1919