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miércoles, octubre 3

Filosofía y Educación Cívica

Sólo aquellos de ustedes que sean o hayan sido estudiantes (o padres de niños en edad escolar) saben realmente el estrés que produce un comienzo de curso. Hay que comprar libros, forrarlos, material escolar, carteras, uniformes... libros agotados, uniformes que tardan... "para la semana que viene lo tengo aquí"...

Libros de texto
Libros de Texto

Por eso, hoy, desde La Arbonaida, voy a tratar, no sólo de solidarizarme con todas esas personas, además, si es posible, ayudar a una de ellas.

¿Están angustiados buscando el libro de texto de Primero de Bachillerato de "Filosofía y Ciudadanía?" ¿concretamente el de editorial Santillana? Dejen de buscar, yo sé dónde lo pueden encontrar: en Andalucía, en el hipermercado Acampo de Granada.

Tiene una particularidad, nada importante:

Libros de texto
Filosofia eta Gizabide Hezkuntza
el libro está escrito en euskera. Pero vamos, es un detalle mínimo que no tiene demasiada importancia: sobre todo si hay verdadero interés por aprender.

Nota: las fotografías han sido tomadas, realmente, en Hipermercado Alcampo de Granada. Y el libro de la Editorial Santillana "Filosofia eta Gizabide Hezkuntza" (Filosofía y Educación Cívica) es de 1º de Bachillerato (1 Batxilergoa). 
No me pregunten cómo han llegado ahí... no creo que nadie lo sepa. Pero... ¿quién les dice que no puede ser útil para alguien?

jueves, febrero 17

Arrojados a la vida

La vida nos es dada....

Vivimos aquí, ahora –es decir, que nos encontramos en un lugar del mundo y nos parece que hemos venido a este lugar libérrimamente. La vida, en efecto, deja un margen de posibilidades dentro del mundo, pero no somos libres para estar o no en este mundo que es el ahora. Cabe renunciar a la vida, pero si se vive no cabe elegir el mundo en que se vive. Esto da a nuestra existencia un gesto terriblemente dramático. Vivir no es entrar por gusto en un sitio previamente elegido a sabor, como se elige un teatro después de cenar –sino que es encontrarse de pronto, y sin saber cómo, caído, sumergido, proyectado en un mundo inmanejable, en estar de ahora. Nuestra vida empieza por ser la perpetua sorpresa de existir, sin nuestra anuencia previa, náufragos, en un orbe impremeditado.

[…] La vida nos es dada –mejor dicho, nos es arrojada o somos arrojados a ella, pero eso que nos es dado, la vida, es un problema que necesitamos resolver nosotros. Y lo es no solo en esos casos de especial dificultad que calificamos peculiarmente de conflictos y apuros, sino que lo es siempre. Cuando han venido ustedes aquí han tenido que decidirse a ello, que resolverse a vivir este rato en esta forma. Dicho de otro modo: vivimos sosteniéndonos en vilo a nosotros mismos, llevando en peso nuestra vida por entre las esquinas del mundo. Y con esto no prejuzgamos si es triste o jovial nuestra existencia: sea lo uno o lo otro, está constituida por una incesante forzosidad de resolver el problema de sí misma.

[…] Hemos sido arrojados en nuestra vida y, a la vez, eso en que hemos sido arrojados tenemos que hacerlo por nuestra cuenta, por decirlo así, fabricarlo. O dicho de otro modo: nuestra vida es nuestro ser. Somos lo que ella sea y nada más –pero ese ser no está predeterminado, resuelto de antemano, sino que necesitamos decirlo nosotros, tenemos que decidir lo que vamos a ser; por ejemplo, lo que amos a hacer al salir de aquí. A esto llamo «llevarse a sí mismo en vilo, sostener el propio ser». No hay descanso ni pausa porque el sueño, que es una forma del vivir biológico, no existe para la vida en el sentido radical con que usamos esta palabra. En el sueño no vivimos, sino que al despertar y reanudar la vida, la hallamos aumentada con el recuerdo volátil de lo soñado.
J. Ortega y Gasset: ¿Qué es filosofía?
Obras completas, VII. Alianza Editorial-Revista de Occidente, Madrid.

Fotografía: La vida nos es dada

lunes, mayo 17

Libre albedrío

« ¡He aquí la excelente estupidez del mundo; que, cuando nos hallamos a mal con la Fortuna, lo cual acontece con frecuencia por nuestra propia falta, hacemos culpables de nuestras desgracias al sol, a la luna y a las estrellas; como si fuésemos villanos por necesidad, locos por compulsión celeste; pícaros, ladrones y traidores por el predominio de las esferas; beodos, embusteros y adúlteros por la obediencia forzosa al influjo planetario, y como si siempre que somos malvados fuese por empeño de la voluntad divina! ¡Admirable subterfugio del hombre putañero, cargar a cuenta de un astro su caprina condición! Mi padre se unió con mi madre bajo la cola del Dragón y la Osa Mayor presidió mi nacimiento; de lo que se sigue que yo sea taimado y lujurioso. ¡Bah! Hubiera sido lo que soy, aunque la estrella más virginal hubiese parpadeado en el firmamento cuando me bastardearon.»
William Shakespeare
El rey Lear (fragmento)

domingo, mayo 9

Aristóteles, la playa y el Zoon Politikon

Ayer, en la playa, me acordé de Aristóteles. Es algo que me ocurre de vez en cuando.  Concretamente, me ocurre cuando estoy en una playa en la que hay pocas personas.

Sé que dicho así suena presuntuoso y pedante, pero no lo es. Me explicaré.

Decía Aristóteles que “El hombre es un animal social (zoon politikon) que desarrolla sus fines en el seno de una comunidad”, que el ser humano está creado para vivir en compañía, integrarse a un grupo y ser parte importante del mismo. A través de este logra una perfección individual como persona, debido a su interacción.

Y hay hombres (y mujeres) que no abandonan esa faceta de animal social (zoon politikon) jamás: aunque sea sábado, aunque estén descansando, aunque sólo pretendan tomar el sol con los amigos y aunque estén en una playa solitaria de más de dos kilómetros de longitud...

Zoon Politikon

Esa es la única explicación, una rspuesta que está en los Clásicos: su ansia por vivir en compañía e integrarse en el grupo les lleva a colocarse a escasos cuatro metros del lugar en donde yo estoy tumbado en la playa.

Esto, que podría pensarse que es algo excepcional, es totalmente habitual. Ocurre, con mayor frecuencia, en las playas de la Comarca de la Costa Tropical. Desconozco el motivo, pero, os puedo asegurar que ocurre siempre del mismo modo: aunque os encontréis completamente solos/as en una playa de varios kilómetros de longitud, si llegan a la playa más personas, estas procurarán colocarse a la distancia mínima para hacerte sentir incómodo por su cercanía y no les puedas decir nada (máximo a ocho metros)...

Me consuela que, al menos el grupo de ayer, los que aparecen en la foto, no llevaba uno de esos Radio CD portátiles con los Jonas Brothers a "tó pastilla"....

Fotografía: Zoon Politikon

martes, octubre 9

Tempus fugit

Recuerdos
Fotografía: Recuerdos - Autor: Landahlauts


El tiempo que tenemos no es corto; pero perdiendo mucho de él, hacemos que lo sea, y la vida es suficientemente larga para ejecutar en ella cosas grandes, si la empleáremos bien. Pero al que se le pasa en ocio y deleites, y no la ocupa en loables ejercicios, cuando le llega el último trance, conocemos que se le fue, sin que él haya entendido que caminaba. Lo cierto es, que la vida que se nos dio no es breve; nosotros hacemos que lo sea, y que no somos pobres, sino pródigos en tiempo; sucediendo lo que a las grandes y reales riquezas, que si llegan a manos de dueños poco cuerdos, se disipan en un instante; y al contrario, las cortas y limitadas, entrando en poder de próvidos administradores, crecen con el uso.
 
Lucio A. Séneca (Siglo IV a. N.E.) Filósofo Andaluz 
Extraido de "De breuitate vita"

miércoles, julio 4

Expectativas

Fotografía: Realidad Distorsionada Autor: Landahlauts
"Por regla general, las alegrías resultan ser muy inferiores a nuestras expectativas; los dolores, por el contrario, muy superiores a ellas"
De: Parerga und Paralipomena, 1851 Autor: Arthur Schopenhauer (1788-1860)
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martes, junio 26

Para empezar el día


Cada mañana, antes de salir a la calle, debiéramos considerar seriamente la posibilidad de leer el fragmento que aparece a continuación de "La conquista de la felicidad" (1930), de Beltrand Russell. Y, mientras leemos, de fondo, dejar sonar una de las canciones más sencillas y bellas de The Beatles:



« Hay personas que son incapaces de sobrellevar con paciencia los pequeños contratiempos que constituyen, si se lo permitimos, una parte muy grande de la vida. Se enfurecen cuando pierden un tren, sufren ataques de rabia si la comida está mal cocinada, se hunden en la desesperación si la chimenea no tira bien y claman venganza contra todo el sistema industrial cuando la ropa tarda en llegar de la lavandería. Con la energía que estas personas gastan en problemas triviales, si se empleara bien, se podrían hacer y deshacer imperios. El sabio no se fija en el polvo que la sirvienta no ha limpiado, en la patata que el cocinero no ha cocido, ni en el hollín que el deshollinador no ha deshollinado. No quiero decir que no tome medidas para remediar estas cuestiones, si tiene tiempo para ello; lo que digo es que se enfrenta a ellas sin emoción. La preocupación, la impaciencia y la irritación son emociones que no sirven para nada. Los que las sienten con mucha fuerza pueden decir que son incapaces de dominarlas, y no estoy seguro de que se puedan dominar si no es con esa resignación fundamental de que hablábamos antes. Ese mismo tipo de concentración en grandes proyectos no personales, que permite sobrellevar el fracaso personal en el trabajo o los problemas de un matrimonio desdichado, sirve también para ser paciente cuando perdemos un tren o se nos cae el paraguas en el barro. Si uno tiene un carácter irritable, no creo que pueda curarse de ningún otro modo.

(...)

El que ha conseguido liberarse de la tiranía de las preocupaciones descubre que la vida es mucho más alegre que cuando estaba perpetuamente irritado. Las idiosincrasias personales de sus conocidos, que antes le sacaban de quicio, ahora parecen simplemente graciosas. Si fulano está contando por trescientas cuarenta y siete vez la anécdota del obispo de la Tierra del Fuego, se divertirá tomando nota de la cifra y no intentará en vano acallarle con una anécdota propia. Si se le rompe el cordón del zapato justo cuando tiene que correr para tomar el tren de la mañana, pensará, después de soltar los tacos pertinentes, que el incidente en cuestión no tiene demasiada importancia en la historia del cosmos. Si un vecino pesado le interrumpe cuando está a punto de proponerle matrimonio a una chica, pensará que a toda la humanidad le han ocurrido desastres semejantes, exceptuando a Adán, e incluso él tuvo sus problemas. No hay límites a lo que se puede hacer para consolarse de los pequeños contratiempos mediante extrañas analogías y curiosos paralelismos. Yo creo que toda persona civilizada, hombre o mujer, tiene una imagen de sí misma y se molesta cuando ocurre algo que parece estropear esa imagen. El mejor remedio consiste en no tener una sola imagen, sino toda una galería, y seleccionar la más adecuada para el incidente en cuestión. Si algunos de los retratos son un poco ridículos, tanto mejor; no es prudente verse todo el tiempo como un héroe de tragedia clásica. Tampoco recomiendo que uno se vea siempre a sí mismo como un payaso de comedia, porque los que hacen esto resultan aún más irritantes; se necesita un poco de tacto para elegir un papel adecuado a la situación. Por supuesto, si uno es capaz de olvidarse de sí mismo y no representar ningún papel, me parece admirable. Pero si estamos acostumbrados a representar papeles, más vale hacerse un repertorio para así evitar la monotonía.
»


martes, junio 19

Luz al final de túnel



«Contempla en la vela que lleva este candelero, a quien doy a luz, aquello que clarificará ciertas sombras de ideas... No hace falta que te instruya en mi creencia. El tiempo todo lo da y todo lo quita; todo cambia pero nada perece. Uno solo es inmutable, eterno y dura para siempre, uno y el mismo consigo mismo. Con esta filosofía mi espíritu crece, mi mente se expande. Por ello, no importa cuán oscura sea la noche, espero el alba, y aquéllos que viven en el día esperan la noche. Por tanto, regocíjate, y mantente íntegro, si puedes, y devuelve amor por amor.»

Giordano Bruno
Il Candelaio (1528)

lunes, mayo 7

El punto de equilibrio


"Quienes se plantan en las cumbres más altas se exponen a ser carbonizados por los rayos de las tormentas, y quienes se bajan a los más hondos precipicios se arriesgan a desaparecer en el abismo"

Titus Lucretius Carus (99 adC - 55 adC?),
Poeta y Filósofo romano


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jueves, abril 12

Instaurar la paz

Título: Signs of Human 4
Autor:
Zachstern


"El estado de paz entre hombres que viven juntos no es un estado de naturaleza, que es más bien un estado de guerra, es decir, un estado en el que, si bien las hostilidades no se han declarado, sí existe una constante amenaza de que se declaren. El estado de paz debe, por tanto, ser instaurado…"

Extraido de "Para la paz perpetua"
(Zum ewigen Frieden, ein philosophischer Entwurf, 1795)"
Autor:
Inmanuel Kant (172-1804)


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viernes, junio 23

Aristóteles y la amistad

"Algunos creen que para ser amigos basta con querer, como si para estar sano bastara con desear la salud."
Aristóteles (384 a. N.E. - 322 a. N.E.) Filósofo griego.