sábado, marzo 18

La historia del Cavallino Rampante



"...La historia del cavallino rampante es simple y fascinante. El caballito estaba pintado en el fuselaje del caza de Francesco Baracca, el heróico aviador caído en Montello, el as de ases de la I Guerra Mundial.
Cuando gané en 1923 el primer Circuito del Savio, que se corría en Rávena, conocí al conde Enrico Baracca, padre del héroe; de aquel encuentro nació otro con la madre, la condesa Paolina. Fue ella quien me dijo un día: "Ferrari, ponga sobre sus coches el cavallino rampante de mi hijo, le traerá fortuna...".
Conservo todavía la fotografía de Baracca con la dedicatoria de sus progenitores, en la que me confiaban el emblema . El cavallino era y sigue siendo negro; yo le añadí el fondo amarillo, que es el color de Modena..."

Enzo Ferrari.

Se debe aclarar que, si bien el caballo rampante pasó a ser el emblema de la escudería, en 1932 la imagen aparecería en público como escudo, durante la carrera de 24 horas de Spa, donde los pilotos Taruffi y D'Ippolito obtuvieron la victoria. Esto se dio porque Ferrari era una división de Alfa Romeo y la marca ya contaba con su propio logo (una hoja de trébol verde en un triángulo blanco).
Sólo los coleccionistas y seguidores fanáticos de Ferrari son capaces de diferenciar a qué modelo y año del automóvil pertenece cada uno de los distintos diseños del afamado logo. En rasgos generales, se menciona a continuación las principales modificaciones que sufrió la imagen del cavallino:
En 1952 el logo original (el escudo de forma curva dentro de un marco rectangular, con las iniciales S F -Scuderia Ferrari- en la parte inferior) se modernizó. Ya sin el marco rectangular y con las iniciales más grandes, el logo lucía estilizado.
En 1959 apareció el logo en la parrilla del radiador, que hoy ya es marca registrada.
Entre 1962 y 1963 el caballino de la carrocería del auto sufrió modificaciones en su diseño: en color dorado y con relieve.
En 1964 se volvió a la versión plana.
A través de los años, el inconfundible caballo negro de Ferrari que adorna la parte delantera y trasera de los autos sufrió leves cambios: en tamaño, color (plateado o más cercano al dorado) y material (aluminio pulido, anonizado en negro, cromado).
En la actualidad, se utiliza la imagen del caballo en color plateado en su versión con relieve.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Forza Rossa!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Hola, de donde has sacado la foto del cavallino?. Un saludo.