Este es el silencioso grito de socorro de un hijo maltratado:
"Mi mamá es la vergüenza de la familia. No fumes, no bebas... mientras tanto me envenena con barbitúricos."
Estaba escrito en la fachada de una farmacia, en la granadina calle Mesones. Supongo que el pobre chaval lo escribió apresuradamente, mientras su perversa madre compraba un par de cajas de barbitúricos.
De esta foto haría el Maestro King una novela de 1.500 páginas... como mínimo.
De esta foto haría el Maestro King una novela de 1.500 páginas... como mínimo.