miércoles, octubre 29

Abderramán I, el Inmigrado

Abd al-Rahman I al-Dahil

«...Cristianos de la Alpujarra, árabes de la tierra de Granada y Almería, se agolparon en confusa muchedumbre en las playas de Almuñécar, atraídos de la curiosidad e impacientes de conocer al alto personaje que venía a regir sus destinos. Apenas fue divisado el bajel africano, lanzáronse a su encuentro barcas empavesadas y esquifes impulsados por diestros remeros. La gente marinera aclamó al emir entre el rumor de las rizadas olas, mientras el pueblo bullía en el embarcadero. No bien pisó la arena el joven Omeya, le vitoreó, frenética, la muchedumbre. Los jeques le asieron las manos y le presentaron con aparato al pueblo, que redobló sus aplausos. El júbilo que embargaba todos los ánimos, la benevolencia general, le persuadieron que era señor de los corazones y que debía serlo también de la tierra. El gran príncipe gustó por vez primera las lisonjeras aclamaciones de la plebe y mitigó bajo el hermoso cielo del país granadino sus amarguras anteriores....»

Miguel Lafuente Alcántara
Historia de Granada (1844)


Abd al-Rahman I al-Dahil desembarcó en las playas de Almuñécar en el año 755. Un año después proclamaba en Archidona emir independiente de Damasco: Al-Andalus conseguía así la independencia de oriente.

Según la tradición todas las palmeras de la península descienden de una palmera que plantó Abd al-Rahman I con sus propias manos en el jardín de su palacio de Córdoba.

Bajo su reinado, en 785, se comenzó la construcción de la Mezquita de Córdoba, aprovechando el material de una basílica visigoda dedicada a San Vicente.

Nunca llegó a perder ninguna batalla ante ninguno de sus enemigos y en sus últimos años, Abd al-Rahman tuvo que lidiar con una sucesión de conspiraciones de palacio, que reprimió brutalmente. A pesar de ello, fundó la dinastía que aseguró el control omeya de Al-Andalus hasta 1031.

Fuente: Cordobapedia


Fotografía:Abd al-Rahman I al-Dahil
Autor: Landahlauts

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Y que en Córdoba no tengamos en su honor ni una mísera calle, cuando deberíamos dedicarle una gran Avenida... Todo lleno de nombres de curas.

Edurne dijo...

Vaya con el jóven Omeya!
Me ha gustado este pasaje de la historia de Al-Andalus, de España en definitiva... Y lo de las palmaeras!

Más claro, agua dijo...

Ay, Almuñécar, quién la ha visto y quién la ve...

Por cierto, el puente del Corpus lo mismo lo paso en LH... ;-)

Tony Collbato dijo...

La Historia que me enseñarom saltaba de Recesvinto,Wamba,Rodrigo hasta Don Pelayo y las Navas de Tolosa...me escondieron 800 años de convivencia y respeto,amor a la cultura,el arte y aprovechar la naturaleza.Gracias.