Hoy suena en La Arbonaida la obertura de "Tannhäuser o el torneo de canto en el Watburg", de Richard Wagner.
Hay ocasiones en que alguna pieza musical te emociona siempre que la oyes, puede ocurrir en menor o mayor medida y durante más o menos tiempo. Generalmente lo que te conmueve en un instante determidado, con el transcurrir de los años deja de hacerlo o lo hace en menor medida.
Yo tengo algunas canciones y piezas musicales con las que no se cumple lo anterior, sería algo así como mi música de "cinco estrellas".
Pues bien, la Obertura de Tannhäuser, tiene seis. Bien es cierto que la tengo relacionada con un suceso personal muy especial pero, independientemente de ello, cuando la oigo una especie de descarga eléctrica me recorre la espalda y el vello se me eriza. ¿Seré normal?
Escúchala aquí.
3 comentarios:
Momento pedante, que diría Landahlauts.
Sí que lo son, Scemo. Wagner es ahí donde más brillante es. Luego tiene momentos muy áridos y un poco tediosos... o será que yo no le he cogido el "tono" aún.
Luego dicen que la música amansa a las fieras.
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