Títeres de Cachiporra |
Granada, 6 de enero de 1923
En la casa de la familia García Lorca, en la Acera del Casino, se ultiman los detalles. Tres amigos, Federico García Lorca, poeta, Manuel de Falla, músico, y Hermenegildo Lanz, artista plástico, llevan todas las navidades trabajando para hacer una función de teatro de títeres, donde se dan la mano la música, la literatura, la pintura, la escultura, la escenografía… Aunque lo que preparan parece una ingenua fiesta para los niños, para ellos es mucho más: se trata de un “juego serio, muy serio” por hacer un nuevo teatro de títeres andaluz, inspirado en lo mejor de las tradiciones y de las vanguardias artísticas.
La función dio comienzo a las tres de la tarde el día de los Reyes Magos. El programa quedó registrado como Títeres de Cachiporra.
Constó de tres partes: Los dos habladores, entremés antiguamente atribuido a Cervantes, La niña que riega la albahaca y el príncipe preguntón, cuento popular adaptado al teatro por Federico García Lorca, y el Misterio de los Reyes Magos, obra anónima de los siglos XII-XIII.