Ahí está el pobre ¿caniche?, aguantando el chaparrón. Tratando de mostrarse digno a pesar de ser portador de una flor en la cabeza, unas gafas de espejo, un mantón naranja, un vestido de faralaes y un slip de piel de leopardo. Y todo ello por capricho de su "dueña".
La señora lo lucía orgullosa a todo el que pasaba por la concurrida Calle Larios en plena Feria de Málaga. Está claro que cuando el abogado George Graham Vest, en su "Eulogy on the Dog", le dio al perro el título de "El Mejor Amigo del Hombre"... tenía motivos de sobra.
Fotografía: Ignominia
Autor: Landahlauts