martes, marzo 27

El pequeño infierno florido


'Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj'

Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan —no lo saben, lo terrible es que no lo saben—, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj. 

Autor: Julio Cortázar
Extraido de "Historias de Cronopios y Famas

11 comentarios:

madreselva dijo...

me encantan las instrucciones. ese: tú eres el regalo, es genial.
Cariños, Land.

Ros dijo...

claro que te piensas, que los publicistas solamente tienen referencias new age???? son unos tristes y se encargan de transmitir esa tristeza y sensación de desazón al resto... si te das cuenta y yo ya me voy al lado publi de la vida... todas las campañas de los seat león, independientemente dela agencia creativa que los haya realizado, han basado su fuerza en el desasosiego.... mmmmmmm desasosiego???? mejor salto a la entrada siguiente y te hablo de pessoa!!!!

se me ha ido la pinza en este comentario

Landahlauts dijo...

También para ti, Madreselva.

Ros:
NOoooo, no se te ha ido. No te cortes.
Es curioso, no me había fijado en esa idea común del desasosiego de los anuncios de Seat León... no la había notado. Me resulta curioso que se mantenga una idea aunque pase el tiempo y cambien las agencias...
Aunque a mi, particularmente, esta idea de no me atrae hacia el producto. La verdad.

Voy a leerte lo de Pessoa...

Alvaro dijo...

Eso pasa también si cambias "reloj" por "amor"

Saludos

LOLA GRACIA dijo...

Muy bueno Cortázar. Anyway, me encantan los relojes, más si me lo regalan. jeje.

Más claro, agua dijo...

Siempre es bueno parar el reloj para leer a Cortázar

An dijo...

Saludos

Anónimo dijo...

Cuando te cae en las manos una joya como esta, tienes que cuidarlo como a ti mismo.

Anónimo dijo...

A mi Cortázar se me hace árido. Pero este texto me gusta. Y creo que lo he oído hace poco en algún sitio, pero no recuerdo donde.

Anónimo dijo...

Relojes (Julio Cortázar)

Un ama tenía un reloj de pared y todas las semanas le daba cuerda CON GRAN CUIDADO. Pasó un cronopio y al verlo se puso a reír, fue a su casa e inventó el reloj-alcachofa a alcaucil, que de una y otra manera puede y debe decirse.
El reloj alcaucil de este cronopio es un alcaucil de la gran especie, sujeto por el tallo a un agujero de la pared. Las innumerables hojas del alcaucil marcan la hora presente y además todas las horas, de modo que el cronopio no hace más que sacarle una hoja y ya sabe una hora. Como las va sacando de izquierda a derecha, siempre la hoja da la hora justa, y cada día el cronopio empieza a sacar una nueva vuelta de hojas.
Al llegar al corazón el tiempo no puede ya medirse, y en la infinita rosa violeta del centro el cronopio encuentra un gran contento, entonces se la come con aceite, vinagre y sal, y pone otro reloj en el agujero.


La cosina. Besos.

AB dijo...

Não uso relógio... lol

beijos