miércoles, enero 31

Be yourself, my friend.


Era un venerable maestro. En sus ojos había un reconfortante destello de paz permanente. Sólo tenía un discípulo, al que paulatinamente iba impartiendo la enseñanza mística. El cielo se había teñido de una hermosa tonalidad de naranja-oro, cuando el maestro se dirigió al discípulo y le ordenó:

--Querido mío, mi muy querido, acércate al cementerio y, una vez allí, con toda la fuerza de tus pulmones, comienza a gritar toda clase de halagos a los muertos.

El discípulo caminó hasta un cementerio cercano. El silencio era sobrecogedor. Quebró la apacible atmósfera del lugar gritando toda clase de elogios a los muertos. Después regresó junto a su maestro.

--¿Qué te respondieron los muertos? -preguntó el maestro.

--Nada dijeron.

--En ese caso, mi muy querido amigo, vuelve al cementerio y lanza toda suerte de insultos a los muertos.

El discípulo regresó hasta el silente cementerio. A pleno pulmón, comenzó a soltar toda clase de improperios contra los muertos. Después de unos minutos, volvió junto al maestro, que le preguntó al instante:

--¿Qué te han respondido los muertos?

--De nuevo nada dijeron -repuso el discípulo.

Y el maestro concluyó:

--Así debes ser tú: indiferente, como un muerto, a los halagos y a los insultos de los otros.



*El Maestro dice: Quien hoy te halaga, mañana te puede insultar y quien hoy te insulta, mañana te puede halagar. No seas como una hoja a merced del viento de los halagos e insultos. Permanece en ti mismo más allá de unos y de otros.

Anónimo Indio

12 comentarios:

Más claro, agua dijo...

Sugerencia del día: remite este post a todos los partidos políticos con representación parlamentaria.

Por nosotros, que no quede... Nos sienta tan mal la crispación...

Alvaro dijo...

Bueno, pues se indiferente a esto: sigues teniendo un blog de pm, jeje. Hala, be water, my blogfriend.

Mi votillo y un abrazo.

PD: Y recuerda, si te pete mañana...
http://alvarosinalba.blogspot.com/2007/01/
un-post-por-la-paz.html

Anónimo dijo...

Se te ve muy guapo paseando a tu hijo, Landah.

Mª Rosa Rodríguez Palomar dijo...

Creo que si he aprendido algo en los años que he vivido, es algo que se resume en esas pocas palabras, ser uno mismo. Podrás gustar a unos y a otros no, pero nunca puedes aspirar a gustar a todos. Recuerdo que Vallejo Nágera en su libro: "Cómo hablar en público" resumía las enseñanzas y consejos en esa frase, como clave para alcanzar el éxito: Sé tu mismo. Gracias por tu visita y saludos, mi voto es símbolo de un apretón de manos.

Anónimo dijo...

¿Aunque duelan? No se, no se, no todos somos tan tolerantes, aunque el maestro lo diga.

Anónimo dijo...

Ya ves, me has dejado helado...
Que razón tienen los maestros tu... y yo pasando de los mios del insti. Ya me vale, así me ha ido.

Johnymepeino dijo...

Sí, lo recuerdo, es un hermoso Misdrash hebreo con el que inculcan a los niños a obrar conforme a su conciencia y no conforme a los dictados de la sociedad.

Me apunto a lo expresado por "Mas claro agua": debieras remitirlo como contenidos de la asignatura Educación para la ciudadanía.

Aunque claro, entonces ya no querrían poner esa asignatura.

Un blogabrazo.
sigo votando

AB dijo...

sabias palabras... ;)

beijos :)

Anónimo dijo...

me siento identificada con lo de:"quien hoy te halaga,mañana te insultará",vivido en mis propias "cannes".
una verdad como un templo

Anónimo dijo...

Benditas cannes.

Mike dijo...

Mi comentario va dirigido a tu entrada última sobre el día de la paz. Sólo decir que me parece vergonzoso que ese día no lo celebremos los otros 364 días que tiene el año. El mundo está fatal de los nervios...

Landahlauts dijo...

Bueno, Lamalgama, sé positivo. Piensa que ahora sólo nos quedan por pensar en la paz 364 días. Antes nos quedaban 365. ¿No crees?

:)