Si la foto te parece espeluznante, también te lo parecerá su historia: Fue tomada por el fotógrafo sudafricano Kevin Carter. ¿El nombre de la niña? Nadie lo sabe, pensad: si su vida importaba un carajo, su nombre aún menos. El caso es que el fotógrafo, del que sí sabemos el nombre, la fotografió y se marchó sin hacer nada por ayudarla. Fue la fotografía de su carrera: de hecho recibió el Premio Pulitzer. La conciencia, sin embargo, no lo permitió descansar. Tres meses después de recibir el premio se quitó la vida. Landahlauts sin palabras.
12 comentarios:
Diosss, que fuerte!!!!!
Ya conocía la historia. Andaluz, ya no había nada que hacer, a veces las cosas no son tan simples. Y el hecho de que se quitara la vida es una prueba de que si le afectaba el tema, no te parece?
Pues yo no la conocía y me parece que es muy trágica.
Supongo que ser periodista tiene que acabar edureciendo contra todo ello, pero ¿cómo puedes ver morir a alguien y no hacer nada?
imagino que tu ética te impide ser simplemente mero espectador de los horrores a veces... imaginar si los médicos tuvieran cargo de conciencia cada vez que piensan que se equivocan... porque son humanos y lo harán...
A Apus:
Sí, supongo que podría haberle resbalado todo y ya está.
A E.H.F.:
Supongo que, como dice Ros en el post de abajo... acostumbrándote.
A Ros:
Hace años hacía footing con unos amigos que eran médicos. Conversamos mientras corríamos de muchas cosas, entre ellas de trabajo. Al principio me llamaba la atención la "frialdad" con que hablaban de alguien que, en algunos casos, había acabado siendo un "exitus" (había muerto). Con el tiempo me di cuenta de que, me gustara o no, hablaban de su trabajo, como cualquiera: el hecho de que se plantearan cosas entre ellos demostraba que les interesaba.
Pero, sí, supongo que si vives entre tragedia y muerte, no puedes estar el día entero llorando... aunque sea lo que apetezca.
Es increíble el mundo tan injusto que habitamos y que nadie de los que puede haga algo por cambiarlo.
¿Y qué se te ocurre a ti que podemos hacer, Gordito?
No es chulería, es que a mi no se me ocurre nada.
Es muy triste.
Muy triste.
Yo sólo podría aportar utopías ( dar el poder a las oenegés por ejemplo) , pero lo único que arreglaría el tema es que los poderosos tuvieran eso que citas en otra entrada: CONCIENCIA.
A Gordito Relleno:
Las ONGs: cualquiera que las conozca mínimamente te dirá que se han transformado en empresas. La única diferencia es que los voluntarios trabajan desinteresadamente, pero, subiendo en nivel: verás puestos de gestión con sueldos muy en condiciones. Acaban siendo empresas recaudatorias a las que solo les interesa que se eternice el problema pq así podrán trabajar durante más tiempo. No son operativas.
Eso si no hay un politicastro corrupto en el país donde llega el dinero... y tiene que poner él la mano antes...
En fin... yo le veo difícil solución.
No, yo hablaba de voluntarios de base, de misioneros... gente que sacrifica de verdad su vida por apoyar a los más necesitados.
Pero también soy muy pesimista al igual que tú.
Ups, lo siento.
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