Aquel día, 4 de febrero de 2009, los analistas estaban especialmente atentos a la publicación de los PMIs servicios de España, Francia, Alemania, Italia, Zona Euro y Reino Unido. Además, en Estados Unidos se iba a divulgar el ISM servicios de enero.
En el ámbito macroeconómico se iba a conocer también las Ventas al por menor de diciembre y el PMI Composite de enero, ambos en la Zona Euro; y la Confianza del consumidor de enero en Reino Unido.
Aunque muchos consideraban, aún más importante, conocer si el Banco Central Europeo (BCE) cumpliría el guión previsto y mantendría los tipos de interés sin cambio (en el 2%) durante su reunión de política monetaria prevista para el día siguiente.
A todo esto, hacía media hora escasa que el Ibex 35 había perdido el nivel de los 8.300, en una jornada marcada por una gran volatilidad (perdía hasta el momento 0,75%). Algo mejor iba el selectivo en París (subía un 1,15%), y en Francfort (un 0,79%).
La peor noticia para muchos era, no obstante, que el desempleo había aumentado en 200.000 personas en el mes de Enero y se admitía, por parte del Gobierno Central, la posibilidad de llegar a los 4.000.000 de personas desempleadas a lo largo del año...
En el ámbito macroeconómico se iba a conocer también las Ventas al por menor de diciembre y el PMI Composite de enero, ambos en la Zona Euro; y la Confianza del consumidor de enero en Reino Unido.
Aunque muchos consideraban, aún más importante, conocer si el Banco Central Europeo (BCE) cumpliría el guión previsto y mantendría los tipos de interés sin cambio (en el 2%) durante su reunión de política monetaria prevista para el día siguiente.
A todo esto, hacía media hora escasa que el Ibex 35 había perdido el nivel de los 8.300, en una jornada marcada por una gran volatilidad (perdía hasta el momento 0,75%). Algo mejor iba el selectivo en París (subía un 1,15%), y en Francfort (un 0,79%).
La peor noticia para muchos era, no obstante, que el desempleo había aumentado en 200.000 personas en el mes de Enero y se admitía, por parte del Gobierno Central, la posibilidad de llegar a los 4.000.000 de personas desempleadas a lo largo del año...
En lo meteorológico tampoco transcurría un invierno muy agradable: una ola de frío asolaba la península desde hacía días. A esa hora, en la calle donde vivía, la temperatura no superaba los 6 °C. El sol llevaba días sin aparecer: una borrasca centrada en el Canal de la Mancha era la culpable. De eso, y de que llevara cuatro días lloviendo de modo ininterrumpido. Esa mañana, excepcionalmente, el sol había logrado colarse a ratos a través de las nubes.
Y, allí estaba él. Le importaba un carajo el ibex 35, la tasa de desempleo, los tipos de interés en la Zona Euro y la Confianza del Consumidor en el Reino Unido.
La calefacción mantenía la casa en unos cómodos 19 °C. Sentado en el taburete del piano, junto a la ventana, observaba la calle. Veía pasar a los transeúntes, encogidos de frío, con prisa por la calle. Los contemplaba con una mezcla de altanería y de soñolienta indiferencia. De vez en cuando el sol aparecía y acariciaba su suave pelo blanco. La luz le deslumbraba y tenía que entornar los ojos. El reloj de pared marcaba las horas, los cuartos, las medias... una y otra vez...
Desconozco si es cierta la creencia de que una esencia individual de la persona (mente, alma, consciencia, energía) vive en un cuerpo en la tierra varias veces y no sólo una. Eso que llaman "reencarnación".
Si es cierto, si existe la reencarnación, y si se puede elegir... elijo ser gato.
La calefacción mantenía la casa en unos cómodos 19 °C. Sentado en el taburete del piano, junto a la ventana, observaba la calle. Veía pasar a los transeúntes, encogidos de frío, con prisa por la calle. Los contemplaba con una mezcla de altanería y de soñolienta indiferencia. De vez en cuando el sol aparecía y acariciaba su suave pelo blanco. La luz le deslumbraba y tenía que entornar los ojos. El reloj de pared marcaba las horas, los cuartos, las medias... una y otra vez...
Desconozco si es cierta la creencia de que una esencia individual de la persona (mente, alma, consciencia, energía) vive en un cuerpo en la tierra varias veces y no sólo una. Eso que llaman "reencarnación".
Si es cierto, si existe la reencarnación, y si se puede elegir... elijo ser gato.
Fotografía: Tras los cristales
Autor: Landahlauts