En el automóvil, algunas personas, sufren una extraña transformación: en cuanto arrancan mutan en unos ceporros egoístas y maleducados, deseosos de tener una excusa para insultar al resto de los conductores.
En el fútbol pasa algo parecido, hay quien disfruta diluyéndose entre la multitud para dar rienda suelta al Dr. Jekyll que llevan dentro...
Música Recomendada: Ozzy Osbourne My Jekyll Doesn't Hide
Fotografía: Me gusta el júrbol
Autor: Landahlauts
5 comentarios:
Landa, la última vez que fuí a ver un partido del Hércules, con un boligrafo y la revista informativa que reparte el club, anoté cerca de cien insultos,sabrosos e imaginativos casi todos, incluyendo frases que indicaban lo que hacía en ese momento la mujer del árbitro.
Forma parte de la sabiduría popular, vamos a aceptarlo así.
Otra cosa, 9 de cada diez psicologos afirma que lo pasamos mejor vestidos de Mr. Hyde.
Saludos.
Yo conduciendo soy muy tranquilo, y viendo fútbol también... ¿Es grave, doctor?
;-)
Hay que agradecer a los inventores del futbol la oportunidad de disfrutar terapia barata todos los domingosj.
mejor gritar en un partido de fútbol entre miles de gritones, que liarse a patadas en el metro, o empujar a la suegra por las escaleras.......o lo mismo no
Cuanta razón.
Lo que da miedo es que si por una chorrada de partido se ponen como fieras, ¿qué puede pasar en caso de guerra, con armas en las manos? Se convierten en bestias sangrientas...
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