jueves, julio 8

La futilidad de las glorias

Durante la de coronación de un nuevo Papa, en la Ciudad del Vaticano, hay un momento determinado de la ceremonia en que un monje interrumpe el acto, muestra unas ramas de lino ardiendo y cuando se han consumido dice "Sancte Pater, sic transit gloria mundi" (Santo Padre, así pasa la gloria del mundo) recordando al Papa que a pesar del boato del acto y  la importancia de su nueva tarea en el papado,  no deja de ser un mortal, y toda la gloria terrena pasa tan rápido como llegó.

El cuadro es de un andaluz de Sevilla, Juan de Valdés Leal (1622-1692). Se llama "Finis Gloriae Mundi" ("El Fin de las Glorias Mundanas") y muestra, entre otras muchas cosas, los restos de un Obispo, revestido con sus prendas litúrgicas y los restos de un caballero de la Orden de Calatrava con su uniforme de gala. Ambos, personajes reconocidos por sus conciudanos y llenos de gloria en vida. Y ahora... simples despojos.

Ayer noche, escuchando la radio mientras subía de pasar la tarde junto al mar, recordé la frase y el cuadro...

Imagen:Triunfo de la muerte. 1672
Oleo sobre lienzo. 220 x 216
Hospital de la Caridad. Sevilla

4 comentarios:

pon dijo...

jomío, qué alegría.......

mujer prevenida vale por dos dijo...

Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
qu'es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
e consumir;
allí los ríos caudales,
allí los otros medianos
e más chicos,
allegados, son iguales
los que viven por sus manos
e los ricos.

(Jorge Manrique)

Lola dijo...

Una vez acabada la partida el rey y el peón vuelven a la misma caja.

Catalina dijo...

Desde el mismo dia que nacemos ,empieza la cuenta atrás!
deberiámos ser mejores con el prójimo ( próximo)y puede que con nosotros mismos.
Ptns Land.