Hoy suena en La Arbonaida Sympathy for the Devil de The Rolling Stones. Es una de las canciones de los Stones que más me ha gustado siempre. Esta canción tiene una curiosa historia que podéis leer aquí.
Sí, sé que puede haber a quien no le parezca muy adecuado que suene hoy domingo, tradicional Día del Señor cristiano, una canción en la que Lucifer habla en primera persona de sus andanzas por el mundo. También puede haber a quien escuchar esta canción le provoque la misma sensación que la de echarle sal en una herida aún sangrante, después de la estampida que los Stones protagonizaron en Andalucía. Se nos quedó la misma cara que a una novia plantada por el novio delante del altar: sola, frustrada, sitiéndose ridícula. Solo que en nuestro caso, en lugar de vestido de novia, llevabamos la camisetita de los Rolling Stones puesta y, en lugar de ramo, en nuestra sudorosa mano apretabamos una entrada, pero la carita de gilipollas era la misma de la casadera abandonada. Pero, queridos míos, queridas mías, hay que sobreponerse y seguir, la vida continúa. Pensad, que nosotros nos iremos y los Rolling seguirán, inmortales, anulando conciertos cada vez que les salga de las narices y siendo leyendas de Rock and Roll.
Afortunadamente la garganta de Mick parece estar repuesta. La cabeza de Keith, si no bien (porque tampoco podemos pedir milagros) pero parece que, al menos, está como estaba. Démosnos por satisfechos.
Permitidme que me presente...
1 comentario:
Que rencorosos sois.
Tenéis que respetar más a las personas mayores.
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